Planeta Libre , La belle verte
La Belle Verte, un film emitido en España
como “Planeta Libre”, se estrenó en 1996 firmado y protagonizado
por la cineasta francesa Coline Serreau (1947). Sin duda se trata de una
película mítica, inicialmente mal entendida, pero que pronto se convirtió en
una pieza de culto. Destaca por su elegancia, ingenio y sobretodo por su
capacidad crítica hacia una sociedad que avanzaba ya en aquel momento hacia un
destino socioambientalmente inviable.
Al
adoptar el género fantástico desde el punto de vista de los habitantes de otro
planeta que viven en armonía unos con otros y con su entorno, la película
ofrece una particular visión de lo que podría ser la raza humana si esta
reorientara algunas de sus realidades civilizatorias.
Es
memorable la narración de la supuesta evolución de nuestra sociedad que pasó
por lo que uno de los protagonistas del film denomina: "los grandes
procesos y los boicots, en los que las personas tomaron consciencia del daño
ambiental del consumo y boicotearon a todos los fabricantes de productos
nocivos para la salud de los seres humanos, animales y plantas fueron
declarados culpables de crímenes contra el planeta... como la industría
química, agroalimentaria, los fabricantes de tabaco y alcohol, las
farmacéuticas, las nucleares, los fabricantes de automóviles, muchos médicos y
los políticos que se habían enriquecido permitiéndolo todo... Así se llegó al
boicot y se dejó de comprar todo lo que era malo para la vida. Era el arma
absoluta, sin compras no había poder y las autoridades no podían hacer nada
contra eso... una época que llamaron el caos prerenacimiento".
Planeta libre no es una película para burlarse de nuestra
falta de humanidad o civilización, sino un documento para crear un contraste
entre lo que podría ser un mundo en armonía con su entorno y otro que va contra
nosotros mismos y en el cual realmente estamos inmersos.
Podemos
imaginar una sociedad tecnológica avanzada como la que parece inexorable, pero
deberíamos ser conscientes de los riesgos que estamos asumiendo de forma
absolutamente irresponsable cuando adquirimos productos químicos y
farmacéuticos tóxicos. La advertencia ante los peligros por las investigaciones
irresponsables en curso, entre las que se incluyen la inteligencia artificial,
nos rodean por doquier, desde films recientes como EX MAQUINA de
Alex Garland (2015) o por las advertencias insistentes de empresarios nada
sospechosos de anticapitalismo como Elon Musk de Tesla.
Planeta
libre intenta
sobretodo contrastar las costumbres de nuestra sociedad moderna con los
visitantes de un planeta que disponen de tecnología para viajar por el espacio,
pero que han cultivado su humanidad y el potencial de sus capacidades
biológicas. Así pues los contrastes y las analogías sirven para mostrarnos el
choque psíquico entre la transformación de la tierra para satisfacer las
necesidades materiales o para vivir en armonía con el resto de seres de la
naturaleza.
El
film tiene realmente escenas de antología como la transformación del terreno de
juego de un campo de fútbol y sus jugadores en un ballet clásico, el concierto
de silencio o la orquestra sinfónica convertida en una alocada representación
musical. No menos sorprendente es la rápida comprensión que tienen los
bosquimanos al encontrarse con los seres del otro planeta ya que no han perdido
sus capacidades empáticas como los occidentales. En definitiva, una película en
la que tras cada diálogo o escena encontramos la sátira a nuestro
comportamiento cotidiano.
Planeta
libre es
una película divertida, del género fantástico y conducida por excelentes
actores. Una sátira mordaz, al tiempo que propone que otro mundo es posible
especialmente si potenciamos nuestra verdadera verdadera esencia humana de
bondad y basada en los sentimientos, en la empatía, en la conexión con los demás,
en lugar de correr de forma alocada por la conquista tecnológica ciega que
conduce al desastre final.
Como
si de un cuento filosófico se tratara, la película aborda temas tan diversos
como el anti-consumismo, el ecologismo, la decadencia de la civilización
industrial, el feminismo, el humanismo, el pacifismo, los valores sociales o el
rechazo de las tecnologías nocivas. Las referencias a la espiritualidad y a las
capacidades humanas como la telepatía, el magnetismo, apoyan las posibilidades
ocultas que tienen los humanos para entablar una nueva relación con la
naturaleza y sus congéneres.
Planeta
Libre tiene
a su vez una importante dimensión poética y que refleja un sueño compartido por
muchas personas ecologistas. Coline Serreau continuó con su compromiso con la
ecología e inspiró a otros cineastas como Agnès Fouilleux que en 2010 rodó el
documental Small is beautiful (110 min) como complemento al
último que estrenó en el mismo año la propia Serreau, "Soluciones
locales para un desorden global” (otra joya cinematográfica).
Hace
21 años, Planeta libre se convirtió en un foco de luz verde
para un mundo cada vez más hipócrita y adicto a la tecnología deshumanizadora.
Este es un homenaje a la mayoría de edad de una película que se anticipó a su
tiempo y que hoy es más que nunca necesario de recordar.
FICHA
TÉCNICA
Planeta
Libre (La
Belle Verte), es un pequeño y lejano planeta que en el año seis mil, su
sociedad está tan avanzada que han prescindido del dinero y de la mayor parte
de los objetos materiales, viven todos sus habitantes alrededor de 250 años, se
comunican telepáticamente y están en contacto completo con la naturaleza.
En la
reunión anual del planeta, donde intercambian sus producciones y deciden
comunitariamente sus viajes, surge siempre la misma pregunta: "¿alguien
quiere ir a la Tierra?" Nadie se atreve a hacer el viaje a este peligroso
y primitivo planeta, hasta que Milá, la hija secreta del último hombre que
visitó la Tierra, se presta como voluntaria.
Su
presencia en el París actual contrasta la manera de ver el mundo de su gente
con la sociedad que observa. A través de Milá, descubrimos con humor las
aberraciones de nuestra sociedad y las asombrosas cosas que pueden pasar cuando
uno se "conecta" con otra realidad, en otro nivel de conocimiento.
Título
original: La belle verte
Director: Coline Serreau
Intérpretes: Coline Serreau, Vincent Lindon, Marion Cotillard, Catherine Samie, Patrick Timsit
Guión: Coline Serreau
Fotografía: Robert Alazraki
Música: Coline Serreau
Duración: 95 min.
País: Francia
Año: 1996
Director: Coline Serreau
Intérpretes: Coline Serreau, Vincent Lindon, Marion Cotillard, Catherine Samie, Patrick Timsit
Guión: Coline Serreau
Fotografía: Robert Alazraki
Música: Coline Serreau
Duración: 95 min.
País: Francia
Año: 1996